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Ya lo dijo Charles Darwin "no es la especie más fuerte la que sobrevive, tampoco la más inteligente, sino la que mejor responde al cambio".
La situación actual abre un escenario complicado, sobre todo para autónomos y pequeñas empresas. Para muchos también se convierte en una oportunidad para reorientar su negocio adaptándose así a la nueva realidad que vive nuestra sociedad actualmente.
En la década de los 90, una serie de empresas se reinventaron dentro de su sector, algunos como necesidad, otros viendo una oportunidad de expansión. Todos ellos experimentaron crecimientos muy sustanciales: ZARA en el mundo de la moda, NH en los hoteles, IKEA en la decoración del hogar e ING en la banca; son sólo algunos ejemplos. 20 años después con la crisis del 2008 Nintendo reinventó las consolas de videojuegos sacando la "Wii" y Apple reinventó los teléfonos móviles con el "iPhone".
Si tenemos en cuenta que las ventas del pan han disminuido en los pasados años considerablemente, ahora vemos que una crisis sanitaria puede afectar negativamente a nuestro sector aún más. El mundo de la panadería ha visto como sus negocios han tenido que cerrar en pocas semanas debido a la cuarentena como consecuencia del cierre de algunos de sus grandes clientes en el mundo de la hostelería y la restauración. Otros han podido mantener sus obradores activos por estar situados cerca de sus clientes diarios, pero son la minoría.
La panadería es parte del sector primordial de la alimentación que asegura el abastecimiento de alimentos a la población.
Entonces, ¿no debería el sector de la panadería tener una serie de garantías para no tener que verse inmerso en el cierre o en el descenso de sus ventas? Aquí es donde nos preguntamos si existe una alternativa para nuestro sector no se vea impactado negativamente en el presente y en el futuro. ¿Nos podemos reflejar en otras empresas y sectores que se han reinventado en el pasado? ¿Es factible vender pan online?
Las ventajas de pasarse al mundo online y de cambiar el sistema de distribución las conocemos, porque la mayoría de nosotros somos consumidores online. ¿Quién no ha reservado una habitación de hotel vía internet o comprado alguna vez en Amazon? ¿Quién no ha usado alguna vez una APP para ver el tiempo o buscado en Google una dirección? En el fondo las herramientas ya están disponibles, sólo que no están adaptadas a nuestro entorno y a nuestros negocios.
El e-commerce, o la venta de artículos en internet, reduce gastos, genera lealtad con los clientes, aporta un mayor alcance de público, añade seguridad para el vendedor y el comprador, facilita la entrega de productos y aumenta el ticket medio entre los clientes.
Además, las tiendas online están abiertas al público las 24h, no tienen limitaciones geográficas, pueden ayudar a aumentar el número de clientes, permiten realizar un estudio de los clientes sobre sus gustos y compras, aumentan la visibilidad del negocio y pueden crear una comunidad.
Toda empresa tiene la posibilidad de crear una web personal con una tienda en línea (online) o la de unirse a una plataforma colaborativa, que no es otra cosa que un sitio web, que centraliza todas las funcionalidades ligadas a la venta online, poniendo a disposición de los diferentes usuarios todas sus funcionalidades.
En concreto, estaríamos hablando de la creación de un Marketplace.
Marketplace es el término acuñado del inglés que hace referencia a un mercado online donde los productos y la información de inventario son proporcionados por los usuarios, mientras que las transacciones son procesadas por el dueño del sistema. Los Marketplaces más conocidos y usados a nivel mundial son AirBnB, Alibaba y Amazon.
El vendedor aumenta su presencia online y su visibilidad estando incluido en Marketplace, ahorrándose la creación y el mantenimiento que acarrea tener una web propia con su tienda online. Además, mejoraría su posicionamiento en los buscadores por ser una página web con mayor tráfico versus una web de una panadería individual. Se trataría de un canal de ventas adicional, que además aportaría mayor credibilidad al estar incluido en un listado de panaderías nacionales.
Para comenzar tu negocio en un Marketplace es necesario establecer un plan de negocio que defina los productos físicos a vender, la estrategia de distribución del producto y quienes serían los compradores y quienes los vendedores (un negocio B2B, os sea business to business o un negocio B2C, business to customer).
Si te decantas por la distribución directa de tus productos, significa que te encargarás de la venta inmediata al consumidor, lo que puedes hacer a través de una tienda online o un Marketplace.
Estas son dos de las opciones más corrientes como canal de distribución para la panadería:
En cualquier de los dos casos, los gastos de distribución irían a cargo del consumidor y se le sumarían al importe de compra. Para hacer los gastos de distribución más asequibles e interesantes de cara al consumidor, lo que se recomienda es proporcionar estos al volumen de compra. Esto quiere decir, a mayor volumen y gasto de compra, menor los gastos de distribución. No es lo mismo cobrar 1,5 EUR de gastos de distribución sobre una barra de pan, que cobrar 1,5 EUR de gastos de distribución sobre seis barras de pan. Pero si además de las seis barras de pan un cliente comprase 6 croissants y 12 panecillos, el gasto se puede incluso disculpar gracias a un elevado volumen de venta.
¿Entonces, te animarías a unirte a un Marketplace de Panaderos en tu país? ¿Te gustaría que el Club Richemont de tu país liderara este proyecto para sus socios? ¿Consideras que la venta online de pan saludable podría favorecer positivamente tu negocio?
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